SALIENDO DE LA OSCURIDAD

Al poco de entrar en mi vida, mi alma gemela salió de ella. En aquel entonces pensaba que sería definitivamente, aunque afortunadamente, tiempo más tarde supe que no era así.

La intervención de Inti, un guía encarnado temporalmente en un humano (ver post titulado "Un guía encarnado temporalmente"), trajo más caos si cabe a mi vida. Y hablo de caos, porque a pesar de la valiosa información que me dio, yo no estaba preparada ni a nivel humano ni a nivel espiritual para las consecuencias que todo aquello acarreaba.

Mi alma gemela salió de mi vida. No entraré en detalles, porque fue algo muy doloroso y porque es demasiado largo. Me vi de nuevo intentando una relación con mi ex-novio, que volvió a fracasar nuevamente. No entendía la intervención de aquel guía encarnado, cuando al final, las cosas, una vez más, habían salido mal.

Estaba totalmente sumida en la oscuridad. Mi alma gemela estaba desaparecida. Yo le amaba con toda mi alma. Todavía no había asimilado las cosas sobrenaturales que me habían sucedido desde días antes de su aparición en mi vida, y ahí estaba, sola, desdichada, amargada, llena de energía negativa. Sentía en mi casa esa energía negativa. Era como si hubiese presencias malignas, que me acechaban, especialmente en la noche, cuando me sentaba a trabajar con el ordenador. Esa negatividad se hacía cada día más patente, hasta tal punto que empecé a asustarme. Entonces, un amigo mío que trabajaba liberando esas energías negativas, me ofreció su ayuda.

Una noche, quedamos a través del messenger, ya que él no vivía en mi país. Me dio una serie de instrucciones sobre lo que tenía que hacer. Preparé aceite para ser bendecido y me senté delante de la pantalla con toda la fe que era capaz de tener. Él comenzó con una serie de oraciones. Yo no era amiga de las oraciones hechas ni de la religión impuesta, pero dejé que actuara a su manera, ya que no tenía otra manera de encontrar ayuda. Seguí sus indicaciones, recé con fe, con mucha fe, y lo que pasó durante ese tiempo, fue algo totalmente inesperado.

Sentí que entraban tres presencias en el cuarto donde yo estaba. Eran presencias positivas. Por aquel entonces, yo ya comenzaba a ser sensitiva, a sentir presencias, pero no tenía ese don tan desarrollado como ahora. Me sorprendió "ver" que uno de ellos era Inti, el guía encarnado temporalmente en un humano que había venido a ayudarme. Se colocó a mi izquierda. Después sentí a mi alma gemela, se colocó a mi derecha. Sentí que de alguna forma ellos iban a apadrinarme en el suceso tan importante que iba a tener lugar, aunque realmente no sabía qué iba a suceder. Entonces, la tercera presencia se colocó detrás de mí. Puso sus manos sobre mi cabeza y me dijo algo que no recuerdo. Vi una llama de Luz que salía de sus manos y que flotaba encima de mi cabeza. Supe que la Luz estaba volviendo a mí. Supe que de alguna manera estaba siendo bendecida, y supe quién era Él, la presencia que me estaba bendiciendo.

Aquel fue el comienzo de mi salida de la oscuridad y el comienzo de mi camino hacia la Luz.

Aura

17-8-10