¿CÓMO SABER SI ES MI ALMA GEMELA?

Ésta es una de vuestras cuestiones más frecuentes, una de vuestras inquietudes, al igual que también fue una de las mías.

No existe un método sistemático para saber eso. Eso es algo que se sabe desde dentro, desde nuestra Sabiduría interior. Nuestro Ser sabe muy bien quién es nuestra otra mitad, y para saber si alguien es nuestra alma gemela, debemos conectar con esa parte espiritual nuestra, ya que es quien mejor lo sabe.

Algunas personas me preguntan si alguien es su alma gemela. Yo no soy quien para dar ese dictamen. Puedo opinar según las cosas que estén sucediendo, pero nadie mejor que vosotros mismos para saberlo.

Sé que algunos realmente no sabéis por dónde empezar para averiguar esto. Yo siempre digo que el tema de las almas gemelas es ante todo espiritual y que si no hay un trabajo espiritual interno, es difícil seguir avanzando en este tema. Hay meditaciones que podéis practicar de forma asidua para averiguar quién es vuestra alma gemela y sobre todo, es muy importante el contacto con vuestros guías o con vuestro Yo Superior. Dicho contacto se puede solicitar a través de la meditación también, aunque puede surgir casi de forma espontánea como me ocurrió a mí. Todos tenéis el potencial de la canalización, pero para que el campo dé frutos, debe ser cuidado. El espíritu necesita alimento espiritual, energético, y en la vida que tenemos hoy día muchas veces olvidamos ese cuidado. Es conveniente que de forma diaria dediquéis un tiempo a relajaros, a meditar y a buscar respuestas a aquello que os inquieta, pero no con la mente, sino a través de la meditación.

Contaré de nuevo cómo supe yo quién era mi alma gemela, aunque ya he comentado algo en algunos post.

En mi caso, yo no buscaba al alma gemela, al menos, no conscientemente, pero los guías lo metieron directamente en mi casa. Es algo que está narrado en el post de abril "Nuestro reencuentro". Con las cosas "extrañas" que nos pasaron ese día y las semanas después, yo comencé a intuir que había algo muy especial entre nosotros "allá arriba". Un día le pregunté, puesto que en aquel entonces él tenía mucha conexión espiritual, de hecho, a veces parecía que me hablaba un ángel. Él fue el primero en confirmar mis sospechas: "Tú eres mi mitad. Somos almas gemelas". Así fue como se abrió un nuevo camino ante mí. No daba crédito a sus palabras, pero en realidad era algo que yo llevaba sospechando un tiempo.

A partir de ahí empecé a devorar libros sobre almas gemelas y a buscar información en internet. No encontraba a casi nadie que estuviese vivenciando lo mismo que yo y muchas veces desfallecí en la lucha. No era posible que yo fuese la única persona a la que estuvieran sucediéndole esas cosas tan raras.

Meses más tarde, en una sesión de tarot, la tarotista tuvo reparo en decirme algo. Se la veía inquieta y me dijo: "Vas a pensar que estoy loca, pero este hombre parece como parte de tu alma gemela". Yo me reí por dentro y pensé: "Sí, claro, parte... ¡Es mi alma gemela!".

Tiempo más tarde, empecé a canalizar. Los guías me dijeron: "Sois dos partes de un mismo TODO". Y a partir de entonces, mis canalizaciones fueron guiadas para enseñarme a hacer mi trabajo espiritual y humano con mi alma gemela. En todo momento los guías asociaban a ese hombre que yo había conocido, a ese "humano" con mi alma gemela. Yo le sentía a nivel etérico en mi casa y otras veces sentía a su alma. (La diferencia está en que el etérico es como una presencia humana en tu casa, pero sin estar su cuerpo presente, y su alma se siente como una energía muy fuerte).

Por otro lado, yo empezaba a contactar con algunas personas que tenían experiencias similares, y algunas de ellas, de forma sorprendente, tuvieron alguna canalización para mí. En todo momento distintas personas me confirmaron de nuevo que él era mi alma gemela.

Y así pasé más o menos año y medio, recibiendo en todo momento instrucciones de cómo actuar, cómo avanzar, cómo ayudarle, cuando se cruzó en mi camino una persona que hizo caer mi fe. Era una persona más o menos conocida en el mundo de la videncia y de las almas gemelas. Le hice una consulta sobre una experiencias que estaba teniendo a nivel etérico y de alma con mi alma gemela y ella se empeñó en averiguar primero si realmente ese hombre que yo pensaba era mi alma gemela. Yo le dije que esa no era mi pregunta, que YO SABÍA MUY BIEN que era mi alma gemela, pero ella insistió en que si quería que me ayudara, primero debía confirmar eso.

Los resultados no pudieron ser más perjudiciales para mí, al menos a nivel humano. Me dijo que la presencia que sentía en mi casa y el espíritu que sentía, sí eran mi alma gemela, pero que el hombre que yo pensaba que era mi alma gemela, no lo era. ¡Se me vino el mundo abajo! No ya porque fuera o no ese hombre mi alma gemela, sino porque eso implicaba que lo que yo había estado percibiendo durante tanto tiempo en mis canalizaciones, era mentira. Caí en una fuerte crisis de fe. Por aquel entonces, ya tenía buenos amigos espirituales y me ayudaron y apoyaron mucho. Ellos seguían confirmándome que él era mi alma gemela, pero yo ya no creía en nada. Le di más credibilidad a la interpretación de alguien de fuera que a mis propias experiencias.

Días después tuve una canalización que está publicada en el post "Que nadie calle tu verdad". (Creo que está en el archivo de marzo). Ahí los guías me explicaron que esa vidente no había hecho una interpretación correcta y ante todo insistieron en que creyera en mí misma y en mi capacidad de percibir. Aquel momento de crisis me sirvió para renacer con más fuerza y creer más en mis percepciones y para valorarme más como canalizadora.

Desde entonces los guías siempre me han reñido amablemente cuando dudo de alguna de mis canalizaciones. Insisten en que crea de una vez por todas en mi don y que ayude a otras personas. Nunca más he vuelto a dudar que él es mi alma gemela. Es algo que sé de dentro de mí misma y que luego me han confirmado distintas personas, incluido él mismo, ya que desde un primer momento sus guías le dijeron a él quiénes éramos.

Por eso os pido que confíeis en vosotros mismos. Tal vez no encontréis respuestas inmediatas, pero es vuestro propio Ser el que tiene la respuesta a esa pregunta. No os perdáis en fantasías de amores de la tercera dimensión, porque el amor del alma gemela es un amor elevado. Obviamente, puede verse reflejado como una relación humana, pero eso no quiere decir que toda relación humana sea nuestra alma gemela.

Aura

13-6-10